En la primera reunión que tuve con Cristina y Jorge en la cafetería la Bendita de Zaragoza,  para enseñarles mi trabajo, ya vi lo buena gente que eran. Yo creo que congeniamos desde el minuto uno y el tiempo voló en una bonita conversación.

Así que a los días me alegré mucho cuando Cristina me escribió para decirme que querían que fuese su fotógrafo de boda.

La celebración de la boda fue en el restaurante Habitat Sella, en Villanueva de Gállego cerca de Zaragoza. 

Desde su reapertura no lo había visitado y la verdad que es un sitio que se le puede sacar mucho partido para un reportaje de fotos. Unos interiores muy modernos, dos bonitos jardines y su mítico hórreo.

Gracias por dejarme ser el fotógrafo de vuestra bonita y emotiva boda; y gracias por hacerme el trabajo tan fácil.

¿Y tu? ¿aun no tienes fotógrafo para tu boda? Si te gusta lo que has visto tienes mas información aquí.